Barranco, 14 de Marzo 2010
Mis queridos y siempre bien ponderados lectores del maravilloso mundo de la Impro. Les saluda su amiga de siempre Doña Katalina Johnstone de la Covacha, esta vez más contenta que Rossy de Palma después de descubrir la cirugía plástica ya que me encuentro en la tres veces coronada ciudad de los reyes, pues nada más y nada menos que la bella Lima. Así es. Atendiendo una invitación de los amigos de KETO Impro cogí desde La Habana un vuelo charter que mis amigos los hermanos Castro programaron especialmente para mi viaje en mi calidad de embajadora de la cultura caribeña y Patrimonio de la Improvisación Mundial, según la UNESCO. Mis carnes y yo venimos como invitadas especiales al II Encuentro Internacional de Improvisación Teatral que se realizará del 14 al 20 de Marzo 2010 en el Teatro Satchmo de Miraflores con delegaciones de Argentina, Colombia, México y por supuesto Perú. He oído que la ceremonia de inauguración promete sorprender y romper esquemas así que no me la pierdo por nada del mundo.
Si la memoria no me falla, la última vez que vine a Lima fue allá por la década de 1940, cuando yo era parte del staff de bailarinas de la exhuberante Tongolele, en esa exitosa gira latinoamericana que causó revuelo y mucha calentura. En esa oportunidad la conservadora Iglesia Peruana trató de censurar nuestro espectáculo. ¡Pero con que derecho nos iban a censurar si La Tongolele y nosotras teníamos unos cuerpos envidiables y nuestros bailes no le hacían daño a nadie! Recuerdo que cuando estaban a punto de expulsarnos de Perú supuestamente por atentar contra la moral y las buenas costumbres, un grupo de muchachas librepensadoras encabezadas por una joven Chabuca Granda, que en esa época aún no era conocida, salieron a luchar por nuestros derechos y gracias a su lucha y a Yemanyá pudimos presentar nuestros espectáculos en el Sky Room del Hotel Crillón. Recuerdo que a partir de eso Chabuca y yo nos hicimos grandes amigas y después de las presentaciones me llevaba a tomar Pisco al Bar Juanito de ese lindo barrio llamado Barranco y claro, la jarana se alargaba hasta el amanecer. Es que yo siempre fuí bohemia pues y por eso Chabuca y yo nos entendíamos de maravilla.
Recuerdo que un día a las 6 am cuando las dos ya andábamos bastante mareadas con varios piscos encima, Chabuca me llevó a comer ese delicioso pero raro plato llamado Anticucho debajo del Puente de los Suspiros. Confieso que al comienzo yo me negué a comerlo, sobre todo cuando me enteré que estaba hecho de corazón de vacuno. "He roto muchos corazones, pero nunca le he comido el corazón a nadie, Chabuca" recuerdo que le dije. Y ella que siempre se reía a carcajadas de cada palabra que yo le decía, sobre todo despues de varios piscos, me respondió con unas palabras que hasta ahora recuerdo vívidamente: "Déjame que te cuente Kata. El anticucho se prepara con el corazón de una vaca joven y enamorada. Por eso los peruanos somos tan enamoradizos. Come. Vas a ver que te va a gustar y quien sabe, tal vez haga que te enamores más de prisa...". Y bueno, con ese argumento y la sonrisa convincente de Chabuca no me quedó mas que comerme el delicioso anticucho. Y no se si será coincidencia pero desde ese día, parece que me enamoro con mayor facilidad...
Esos son algunos de mis recuerdos de esa Lima de antaño que ahora veo algo cambiada la verdad... Melancólica como soy, le pedí a mis muchachos de Buena Impro Social Club que me buscaran un hotel tradicional y elegante en Barranco y ellos no tuvieron mejor idea que reservarme la habitación presidencial de un prestigioso resort llamado "Las Suites de Barranco". La verdad estoy encantada con el hotel. Mi habitación es gigante y de arquitectura colonial y mi cama no se queda atrás en tamaño. Parece un ring de box. Por otro lado hay mucha seguridad y principalmente veo que aquí se hospedan damas, lo cual me hace sentir muy cómoda y en ambiente. Se nota que es un hotel muy exclusivo ya que a toda hora llegan autos muy modernos con elegantes caballeros de la sociedad limeña.
Bueno queridos amigos, no se pierdan este nuevo festival internacional de Impro que promete mucho. Hay nuevos jugadores en todas las selecciones y estoy segura que veremos partidos vibrantes e historias maravillosas. Por ahora no me atrevo a identificar a un favorito. Creo que todos los equipos tienen posibilidades de llevarse el título. Los dejo porque Sergio Paris, el director de este festival me ha invitado a comer un cebiche en un nuevo restaurant frente al mar así que tengo que alistarme... Me gusta mucho el cebiche, sobre todo el que pica dos veces... ¡¡Uuuyyyy!!
¡Nos vemos en el Satchmo!
Su fiel servidora y amiga
Doña Katalina Johnstone de la Covacha
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